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viernes, 28 de agosto de 2009

Curiosidades: La utilidad de las campanas


Las campanas son un medio de comunicación con un lenguaje propio. Nos indican los oficios religiosos y antiguamente indicaban la llegada del rey, o alarma de incendio o guerra con el toque de arrebato. Todos sabemos al escucharlas si voltean y repican en señal de alegría o si sus tañidos sordos anuncian el toque de difuntos.

Ya en el II milenio a.C. existían en China pero fue el Cristianismo el que difundió su uso colocándolas en lo alto de las torres de sus iglesias: los campanarios, (de ahí su nombre) entorno a los cuales parecen crecer los pueblos. No sólo se usan campanas sino que además éstas pueden agruparse formando carrillones que a partir del XVI interpretan sencillas melodías.

Hay incluso campanas famosas por su significado como la de la libertad en Filadelfia, que se rajó en el alegre repique de independencia o aquellas gigantes como la del Kremlin, en Moscú, fundida en 1733 con 193 toneladas, la de Mingun en Birmania de 88 toneladas, Chonan en Japón con 75 toneladas, la de Pekín con 54 toneladas y la de la catedral de Colonia de 25 toneladas, forman el grupo de las campanas más grandes del mundo.

En la ciudad de Madrid, “las campanadas” más famosas del país, las produce la esfera del reloj de la Puerta del Sol, situado en el antiguo edificio de correos, donde la tradición manda que durante el repicar de cada una de las doce campanadas que emite el reloj en la medianoche del 31 de diciembre (Nochevieja), sean tomadas doce uvas; una por campanada. Esta tradición se ha extendido por todo el país gracias en buena parte a la retransmisión televisiva que se hace cada año en directo.

Existe una tradición muy extendida en la ciudad de Barcelona, según la cual las campanas las "inventó" San Bernardino de Nola, por lo que antiguamente se las llamaba "nolas". San Bernardino -antes de su conversión- era mercader y residía en Barcelona, sintiendo profundamente enraizados sus sentimientos a la vida de la Ciudad Condal. Cuando la fe y la luz del cristianismo le iluminaron quiso dejar un recuerdo en dicha ciudad y le regaló la primera campana que poseyó la Seo barcelonesa. La tradición afirma que ésta todavía se conserva, que es una de las dos que penden del campanario de la capilla de Santa Lucía, Patrona de las gentiles "llucietas" o modistillas. Precisamente, la mencionada campana, cuyo son es distinto al de las demás; sólo deja oír su voz una vez al año: la víspera de la festividad de Santa Lucía (13 de diciembre), bajo cuya advocación, y alrededor de la catedral se agrupan los feriantes de casitas y figuras para los nacimientos de los pesebres, que hacen la felicidad de los niños en las fiestas navideñas.

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